La palabra teleportation, fue inventada por el escritor
Charles Fort a principios de la década de 1930. Fort usó la palabra de heike
para describir la supuesta conexión entre misteriosas desapariciones y
apariciones en distintas partes del mundo. La palabra «teletransporte» fue
utilizada por primera vez por el filósofo Derek Parfit como parte de un
ejercicio mental de identidad.
Científicamente no se conoce ningún mecanismo en el cual, el
teletransporte de objetos macroscópicos pueda ocurrir, ni siquiera de
partículas sub-atómicas. Sin embargo, los investigadores del Instituto Max
Plank en Berlín demostraron que los electrones de las moléculas de nitrógeno en
su forma gaseosa, es decir las onda-partículas existen simultáneamente. En la
ciencia ficción, generalmente se basa en codificar información acerca de un
objeto, transmitir la información a otro lugar, como a través de una señal de
radio, y crear una copia del original en el punto de destino.
El concepto de teletransporte también se ha relacionado con
algunos fenómenos como son el de la bilocación o multilocación, la habilidad de
estar presente en varios lugares al mismo tiempo, generalmente atribuida a los
santos en la Edad Media, y el aporte.
El teletransporte podría consistir en la descomposición de
la materia en información, siendo ésta transmitida a otro lugar en el que se
crearía una copia exacta del objeto teletransportado.